¿QUÉ ES EL HOME STAGING?
Es una técnica de marketing inmobiliario, que nace en los años 70 en EEUU a raíz de una gran
oferta inmobiliaria y una escasa demanda. Con este método, ayudamos a vender o alquilar más
rápido una vivienda por su máximo valor.
Su traducción del inglés significa puesta en escena, y es exactamente de lo que trata: sacarle
partido a la vivienda y hacer que sus compradores o inquilinos se enamoren y se imaginen
disfrutando en ella. Noventa segundos es el tiempo en el que una persona decide si quiere
comprar o alquilar una vivienda, por eso la primera impresión es la más importante.
¿Cómo se consigue? Mejorando la iluminación, optimizando el espacio y el almacenaje, reparando pequeños
desperfectos, adaptando la vivienda a todos los estilos usando colores más neutros, sin incluir
objetos personales, cuidando todos los detalles (mal olor, muebles antiguos, decoración
excesiva…) y finalmente con un reportaje de calidad: fotos atractivas y reales que anuncien la
vivienda sin decepciones.
¿POR QUÉ CONTRATAR HOME STAGING?
Debido a la evolución del mundo inmobiliario, los clientes son mucho más exigentes, por lo que
hay más competitividad y el Home Staging es una forma muy clara de que tu vivienda se diferencie
del resto.
Gracias a la figura del home stager, reunimos a un experto en marketing inmobiliario y a un
diseñador de interiores en la misma persona, con el objetivo de revalorizar el inmueble y
destacar su potencial oculto, haciendo que el futuro comprador o inquilino puedan ver lo que no
son capaces de imaginar.
Los números hablan por si solos: en la venta, el 48% de las viviendas mantiene su precio y el 52%
sube hasta un 25%. En alquiler, en el 65% de los casos el precio sube hasta un 25% o más.
PRINCIPALES ERRORES ANTES DE CONTRATAR HOME STAGING
• No ver tu vivienda como un producto.
Un producto que tiene que entrar por el ojo y llamar la atención de los posibles compradores o
inquilinos. Por eso debemos desapegarnos un poco de nuestro hogar y pensar más como futuro
cliente.
• No hacerte estas preguntas: ¿qué perfil de cliente se va a fijar en mi casa? ¿Qué necesidades
tiene? ¿las cumple mi vivienda? ¿Qué puedo hacer para que las cumpla? ¿Qué le gustaría
encontrarse?
La respuesta es simple: una vivienda limpia, cómoda, sin desperfectos, cuidada, moderna…y un
largo etcétera. Es muy importante saber qué queremos atraer, para saber qué queremos aportar
y cómo hacerlo. Al igual que a no todo el mundo le vale el mismo número de zapato, no a todo el
mundo le vale el mismo tipo de vivienda.
• Muestras tu vivienda tal como está:
Cuando vas a un concesionario a comprar un coche de segunda mano, ¿cómo te lo muestran?
Limpio, impecable, oliendo a nuevo…¿No harías lo mismo con tu casa?.
Aunque tengas un vínculo emocional con todo lo que te rodea en tu hogar (la lámpara de la
familia, las fotos de la comunión, los peluches de los niños…) el futuro cliente no, y en el 90% de
los casos le genera una sensación negativa que le incomoda y le hace decidir que esa casa no es
lo que busca.
• No darle a las fotografías la importancia que tienen:
Aunque hagas todos los puntos anteriores perfectos, si este falla, el trabajo no habrá merecido la
pena: las fotografías son el escaparate de tu vivienda.
Tardamos dos segundos en decidir lo que nos gusta y lo que no. Viviendas a buen precio y bien
presentadas, no pasan la criba porque las fotos son demasiado malas, dando una imagen errónea.
Quizás tu vivienda tiene muchas visitas en los portales pero pocos contactos. Si esto ocurre es
que algo falla…
• Piensas que no necesitas contratar los servicios de Home Staging.
Has oído hablar del Home Staging pero piensas que “esto no me hace falta”, “seguro que es muy
caro”, “yo también puedo ponerlo bonito”. ¡ERROR!
Cuando se trata de nuestra vivienda, nunca somos objetivos con la imagen que proyecta. Como
buen producto, necesita un plan de marketing de imagen para que pueda gustar al mayor número
de posibles clientes logrando que destaque sobre otros similares en la zona.
¿CÓMO SE TRABAJA EL HOME STAGING ENFOCADO A VIVIENDA VACACIONAL?
Uno de los aspectos más demandados hoy en día en las viviendas vacacionales no es sólo el lugar
y el entorno, sino cómo es la vivienda. La competencia actual en este tipo de alquileres, ha hecho
que aumente la exigencia de los posibles clientes y por tanto ya no todo vale a la hora de
presentarla. Ahora hay que cuidar cualquier mínimo detalle, porque ¡todo ayuda!
Según un estudio de la AHSE (Asociación de Home Staging de España) un 88% de las propiedades
que han contratado estos servicios, se han alquilado en menos de 15 días y el 47% en menos de
siete.
Cuando se trata de alquiler de larga duración o vacacional, lo normal es que la propiedad asuma
ese mobiliario y atrezzo, ya que se quedan en la vivienda y tendrá un uso constante, de ahí que
se trabaje con elementos y productos de más calidad que si fuese de venta.
Hay que tener algo muy presente: menos, es más. La decoración tiene que ser acorde al tipo de
huéspedes que se van a recibir: si es un alojamiento para familias, para parejas, por trabajo, …
Por lo que la vivienda tiene que gustar al mayor número de personas posibles, con estancias
tranquilas, neutras y un mobiliario que transmita calidez y paz durante el tiempo que pasen en la
vivienda.
La guinda del pastel es proporcionar al propietario fotos atractivas y auténticas del inmueble para
anunciar la estancia. No hay nada peor que la decepción de un cliente al ver que un alojamiento
no se parece nada a las imágenes que previamente vio al reservar…
Y al final, ¿qué sacamos en claro de todo esto? Las personas nos guiamos por sensaciones, y el
Home Staging no es sino un aliado más en el proceso de alquiler o venta de tu vivienda.
Autora: Roxana Pérez Páez | Web: Amani Home Staging | Instagram: Amanihomestaging